José Luis Busaniche fue un
notable historiador argentino. Nació en Santa Fe de la Veracruz, capital de la
Provincia de Santa Fe, en 1892 y falleció en San Isidro, Provincia de Buenos
Aires, en 1959. Sus obras más importantes están relacionadas con los bloqueos
franco – británicos de 1838 y 1843, el papel que jugó la Provincia de Santa Fe
en esas circunstancias, el Gobierno de Juan Manuel de Rosas y la construcción
del federalismo argentino. En 1938 publica un libro de lecturas históricas
argentinas que reedita en 1959 con el título de Estampas del Pasado.(1) Este libro ha servido de inspiración para
la sección “Rescoldos del Pasado” de El Recopilador He rescatado varios textos
de la colección, reproduciendo parte de las prolija referencias de Busaniche.
Martín de Orué llegó al Río de la Plata en 1538. Realizó varios viajes a España. Desempeñó los cargos de
Escribano y Facto en Asunción.(2)
La producción de alimentos en Asunción en
1573(3)
“De la mar hasta la llegada a
esta ciudad (se refiere a Asunción), es tierra de la más aparejada, de lo
descubierto, para la crianza de los ganados y todo lo demás que en España se
cría; pueden hacerse dos pueblos y más, hasta llegar a esta ciudad, uno en San
Salvador, do tuvo Caboto su asiento, otro en Sancti Spiritus, a do fundó una
fortaleza, porque por allí se puede tratar con (Tucumán), Chile, las Charcas y
el Cuzco con muchos otros pueblos que pueden poblar en esta tierra /.../.
“En esta ciudad y su tierra se
da mucha comida, en tal manera que casi todo ella año se provee de la heredad,
porque el maíz se da dos veces en el año, de seis en seis meses, y los tres
meses de cada cosecha /.../ de manera que el año aquí, para lo de los
bastimentos, se puede decir que no es más que seis meses, porque en la cosecha
se coge maíz, frijoles, habas, calabazas, melones /.../ frutas de la tierra:
uvas, higos, granadas, y algodón; hácese vino que en este año pasan de seis mil
arrobas y de cada día va en alzamiento; el vino es bueno porque con cierto
conocimiento que se hace dura un año y dos y más. En los otros seis meses se
coge maíz, algodón, batatas, mandiocas que es gran bastimento /.../ que esto
dura debajo de tierra tres y más años /.../ y frijoles que dicen tupís y en
este tiempo se hacen las cañas de azúcar cada año sin regarlas.
“La pesquería de este río es
mucha y la caza de venados, grandes y pequeños y los mesmo la de las palomas
que vienen por el invierno y se cazan con redes y patos lo mesmo, perdices y
tórtolas con otras cazas.
“Hay, el río en medio, muy
lindos pastos para vacas y caballos que hay para el servicio del pueblo. Una
legua de esta ciudad, el río abajo, hay unas salinas muy buenas, que, estando
el río bajo, como quedan en seco, se hace tanta sal que se provee el pueblo
para dos y tres años /.../.
“Hay mucho ganado de vacas,
cabras, ovejas, yeguas, puercos que de hoy es menester alejarlos del pueblo
porque van en crecimiento, Dios mediante.
/.../.
“En cualquier parte que hay
metales, hay pastos para ganados, tierra para bastimentos, leña para carbón y
aguas en abundancia y buenas. Sólo los naturales de esta tierra es gente sin
señor y de behetría, inclinados más a la guerra y a comer carne humana, que no
a la labranza y crianza de ganados, los cuales se dan, Dios mediante, en
abundancia, si hubiese buenas guardias, que las becerras tienen paridas a diez
y siete meses de como nacen y las vacas cada año.
“He dado y doy a Vuestra Alteza
/.../ relación de todas estas cosas porque por ellas tendrá entendido que la
falta de no estar poblado un reino en estas provincias, no ha sido sino en los
malos pilotos, porque en lugar de la poblar, la han destruído con andar
buscando la Laguna del Dorado o un nuevo Atabalypa (se refiere a Atahualpa) y
en esto han gastado su tiempo y consumido lo que había para la sustentación de
esta tierra.”
Notas y Bibliografía:
(1) 1959, Busaniche, José Luis,
Estampas del pasado, lecturas de historia argentina, Buenos Aires,
Hyspamérica.
(2) En 1573 escribió al Rey una
relación sobre el estado del Paraguay y de las fundaciones que podían hacerse
sobre el Río Paraná (el documento fue publicado por Blas Garay en 1899 en Asunción,
tomo I).
(3) Busaniche, José Luis, Op.
Cit., pp. 53-54.
Qué lindo post, nostálgico. Mario, vení a ver mis patas de ranas a la provenzal, mi marido dice que son de procedencia italiana, vos sabrás. Un beso,
ResponderEliminarGracias, mir, por tus comentarios.
EliminarEn un sentido muy personal, la inclusión de estos textos representan más un vicio profesional que el ejercicio de una nostalgia.
Con respecto a tu blog, ahora voy a ver esta receta, le cuento a los lectores que representa claramente la idea de cómo es posible seguir viviendo como argentino, sin proponérselo por cierto, cuando se vive por largo tiempo en el extranjero.
No he leído esta receta de ranas a la provenzal... pero intuyo que confirman lo que acabo de enunciar.
HERMOSO VIAJE AL PASADO ESTIMADO MARIO, UN PLACER LEERTE Y LEER LO QUE NOS TRAES DE BUSANICHE, DESCONOCIDO HASTA HOY, PARA MÍ. UN BESO
ResponderEliminarGracias, Pamela, por tu comentario.
EliminarTe cuento que envío semanalmente una comunicación a mis contactos de correo-e, contando las novedades del blog.
En esta última escribí: "Los argentinos llamamos, con justicia, a Santiago del Estero, madre de ciudades. Sin nos concibiéramos inmersos en el continente al que pertenecemos, tendríamos que hacer justicia y poner en ese pedestal materno a otras dos ciudades: Santiago de Chile y Asunción del Paraguay."