miércoles, 6 de mayo de 2015

Payogasta inolvidable: Cocina con pimentón

Sala de Payogasta organizó unas jornadas en torno de la cocina con pimentón en el fin de semana largo del 1º de mayo. Me tocó concurrir y participar con El Recopilador de sabores entrañables.
Las imágenes pertenecen al autor (salvo indicación en contrario)


Todo lo que ocurrió formó parte de una experiencia notable. Uso la palabra de modo intencional. En efecto, la Real Academia Española define “experiencia”, en segunda acepción, de este modo: Práctica prolongada que proporciona conocimiento o habilidad para hacer algo.” y fue precisamente eso lo que vivimos con Haydée en el Alto Valle Calchaquí.
El ascenso por la Cuesta del Obispo en medio de la niebla resultó emocionante, sobre todo cuando llegamos al mirador Piedra del Molino y la pudimos ver desde arriba. A partir de allí, todo fue un encuentro de profundas vibraciones espirituales con la tierra, las personas participantes y la cocina a fuego abierto.
Recorrimos la cancha de secado de pimientos, guiados por las sabias referencias de Julio Ruíz de los Llanos quien nos mostró con paciencia didascálica el proceso de selección de los frutos que permite elaborar el pimentón en sus tres clases (extra, selección y común). Su guía nos introdujo en la historia de este producto en el Valle Calchaquí y las bondades y dificultades de su cultivo, secado y molienda.
Recorrimos la bodega Viñas de Payogasta, primera escala en la Ruta del Vino en la Provincia de Salta, con la guía del ingeniero Alejandro Alonso. Nos mostró las instalaciones y nos explicó cómo se prepara el mistela (corte de torrontés y sauvignon blanc) y el vino top de la bodega. Se trata de un corte de malbec (50%), merlot (35%) y tannat (15%). Sólo el tannat tiene paso por barrica de un año. Este blend tiene una estiba en botella de un año más. Para quienes disfrutamos de los vinos frescos con poca madera, podemos encontrar en éste un ejemplar notable... Es muy placentero de beber.
Por las noches de estrellas y luna llena, el fogón nos esperaba en el patio central de la Sala. Allí el maestro charcutero de la ciudad de Salta, Eduardo Vilte nos deleitó con chorizos secos y frescos (en la segunda noche, explicó una de sus recetas a los participantes). Todas sus creaciones de este fin de semana fueron preparadas con carne de cordero (en algún caso, mezclada con algo de cerdo) y pimentón.
 Las imágenes pertenecen a María Fernanda Sola
Alejandro Alonso, preparó un dulce de pimientos y pimentón que sirvió de postre acompañado de queso de cabra elaborado en la misma Sala de Payogasta. 
En la primera noche, la cocinera profesional Carmen Ruíz de los Llanos nos deleitó con una deliciosa Sopa Nacional. La misma se prepara con frangollo (un maíz molido más fino que el que se usa para hacer el locro, pero mucho más grueso que la harina de maíz). El uso del pimentón le da un toque elegante a este plato de la cocina popular del Valle Calchaquí.
En la segunda noche, me tocó hacerme cargo de los fuegos. Preparé una vieja receta familiar: Estofado de aguja con pasta seca corta. El éxito de la preparación se debió a que condimenté el estofado con mucho pimentón local y una rama de canela. Esta combinación la saqué del recetario de la familia Flores.
Las imágenes pertenecen a María Fernanda Sola
Todas la experiencias resultaron de la mayor satisfacción de los concurrentes. Sin embargo, lo más notable de toda la jornada lo aportó el Valle... El desayunador de Sala de Payogasta ofrece una impresionante vista del Nevado de Cachi.




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